En el mundo de la prensa escrita y digital, existen diversos elementos que ayudan a organizar y estructurar el contenido de un periódico. Uno de ellos, que puede resultar un tanto desconocido para muchos lectores, es el remate. Aunque suena sencillo, el remate cumple un rol importante en la comunicación visual y narrativa del periódico. A continuación, exploraremos qué significa, cómo se usa y por qué es relevante en el diseño y redacción de las publicaciones periodísticas.
¿Qué es el remate en un periódico?
El remate es un elemento visual y editorial que se utiliza en los periódicos para señalar el final de un artículo o sección. Generalmente, se trata de un símbolo o marca gráfica que aparece al final del texto, como una línea, un asterisco, un cuadrado, o incluso una palabra como fin o continúa. Su función principal es informar al lector que ha llegado al final de una sección o artículo, especialmente en aquellos casos donde el contenido continúa en otra página.
En la historia de la prensa escrita, el uso del remate ha evolucionado. En los primeros periódicos de los siglos XVIII y XIX, era común el uso de símbolos como la barra vertical o la doble barra para indicar el final de un texto. Con el tiempo, los editores y diseñadores gráficos han introducido símbolos más creativos y estilizados para adaptarse a los gustos del público y a las tendencias del diseño editorial.
Un dato interesante es que en algunos periódicos modernos, especialmente en formatos digitales, el remate ha sido reemplazado por señales electrónicas o animaciones, indicando que el lector puede hacer clic para continuar leyendo. Esto refleja la adaptación de los medios tradicionales a las nuevas tecnologías.
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El remate como herramienta de navegación visual en los medios impresos
El remate no solo sirve como un marcador de finalización, sino también como una herramienta de navegación visual dentro del periódico. Al incluir un símbolo reconocible al final de cada artículo, se permite al lector anticipar cuándo un contenido termina y cuándo otro comienza. Esto mejora la experiencia del usuario, especialmente en publicaciones con múltiples columnas o artículos cortos.
En periódicos tradicionales, el remate ayuda a evitar confusiones entre los distintos contenidos. Por ejemplo, si dos artículos están uno al lado del otro o si un texto continúa en la página siguiente, el remate actúa como una señal clara de que se está cerrando un bloque de información. Esto es especialmente útil en secciones como deportes, opinión, o noticias breves, donde los artículos suelen ser cortos y se suceden de manera rápida.
Además, el remate puede tener un valor estético, ya que su diseño puede reflejar el estilo del periódico. En publicaciones más formales, se suele usar un remate sencillo, como una línea horizontal, mientras que en revistas o periódicos más modernos se pueden encontrar remates con formas originales o incluso divertidas, como un icono de carita sonriente o una flecha hacia abajo.
El remate en la era digital y su evolución
Con el auge de los medios digitales, el concepto de remate ha evolucionado. En plataformas web, aplicaciones móviles o sitios de noticias, el remate tradicional ha dado paso a señales interactivas o dinámicas. Por ejemplo, en artículos que se extienden por varias páginas, los lectores pueden encontrar botones como Siguiente página o Leer más, que cumplen una función similar al remate clásico.
En algunos casos, se utiliza la animación para destacar el final de un artículo, como una transición suave o un efecto visual que indica que el contenido ha terminado. Esto no solo mejora la navegación, sino que también refuerza la experiencia del usuario en la plataforma digital.
En resumen, aunque el remate tradicional sigue siendo relevante en los medios impresos, en la era digital se ha adaptado para ofrecer una mejor interacción entre el lector y el contenido, manteniendo su esencia como señal de finalización de texto.
Ejemplos de remates en diferentes medios de comunicación
Existen diversos tipos de remates utilizados en los medios de comunicación, dependiendo del estilo y la necesidad de cada periódico. Algunos de los ejemplos más comunes incluyen:
- Línea horizontal o doble línea: Es el remate más tradicional, utilizado en periódicos de tono serio o informativo.
- Asterisco o signo de interrogación: A menudo se usa para indicar que el artículo continúa en otra página o que hay una nota al pie.
- Símbolos gráficos: Periódicos más modernos o juveniles suelen usar iconos divertidos o creativos como caras, manos, o incluso dibujos animados.
- Palabras clave: Algunos periódicos usan la palabra fin o continúa al final del artículo para indicar su cierre o continuación.
Por ejemplo, en el diario *El País*, es común ver una línea horizontal al final de los artículos, mientras que en *El Mundo* se han utilizado asteriscos o pequeños iconos gráficos. En revistas como *National Geographic*, el remate puede incluir un dibujo relacionado con el contenido del artículo, lo que le da un toque visual interesante.
El remate como parte del lenguaje visual periodístico
El remate no es solo una herramienta funcional, sino también un elemento del lenguaje visual del periódico. Al igual que las viñetas, las cabeceras o las ilustraciones, el remate forma parte de la estructura visual que define el estilo de una publicación. Su uso cuidadoso puede transmitir una sensación de profesionalidad, modernidad o incluso informalidad, dependiendo del diseño elegido.
Por ejemplo, un periódico serio y tradicional puede optar por un remate discreto, como una línea horizontal, mientras que una revista juvenil puede usar un remate más llamativo o incluso animado. Esto permite al lector asociar el remate con el tono del periódico y, en algunos casos, anticipar el tipo de contenido que se está leyendo.
En este sentido, los editores y diseñadores gráficos deben considerar el contexto del periódico al elegir el remate. Un remate inapropiado puede desviar la atención del lector o incluso confundirle, especialmente si se usa de manera inconsistente en diferentes secciones.
10 ejemplos de remates usados en medios internacionales
A continuación, se presentan 10 ejemplos de remates utilizados por algunos de los medios de comunicación más reconocidos del mundo:
- El País (España): Línea horizontal al final del artículo.
- The New York Times (EE.UU.): Punto final seguido de una barra vertical.
- El Mundo (España): Asterisco o línea horizontal.
- BBC News (Reino Unido): Línea horizontal en artículos largos.
- The Guardian (Reino Unido): Remate con palabra fin en artículos cortos.
- El Universal (Venezuela): Barra doble o asterisco.
- La Nación (Argentina): Línea horizontal o doble línea.
- Le Monde (Francia): Línea horizontal en artículos de opinión.
- Der Spiegel (Alemania): Línea horizontal en artículos informativos.
- El Mercurio (Chile): Línea horizontal o remate gráfico en secciones juveniles.
Cada uno de estos ejemplos refleja el estilo y la filosofía de diseño de cada medio, mostrando cómo el remate puede ser una herramienta poderosa para definir la identidad visual de una publicación.
El remate como indicador de continuidad o cierre
El remate no solo indica el final de un artículo, sino que también puede señalar que el contenido continúa en otra página. Esto es especialmente útil en periódicos que publican artículos extensos o reportajes largos. En estos casos, el remate actúa como una señal para el lector, indicándole que puede encontrar la continuación del texto en una página posterior.
Por ejemplo, en un periódico como *El Mundo*, es común encontrar un remate que dice Continúa en página 8 o que incluye un asterisco que apunta a una nota al pie indicando la página donde se reanuda el artículo. Esta práctica permite al lector organizar su lectura de manera más eficiente, sin perder el hilo del contenido.
Además, en publicaciones digitales, el remate puede incluir un botón o enlace que lleva al lector directamente a la continuación del artículo. Esta adaptación digital ha permitido mantener la funcionalidad del remate sin sacrificar la usabilidad en entornos online.
¿Para qué sirve el remate en un periódico?
El remate en un periódico cumple varias funciones clave que mejoran la experiencia del lector y la organización del contenido. Entre las principales funciones se encuentran:
- Indicar el final de un artículo: Permite al lector saber cuándo ha terminado de leer un contenido.
- Facilitar la navegación: Ayuda al lector a identificar cuándo un artículo termina y cuándo comienza otro.
- Señalar la continuación del texto: En artículos largos, el remate puede indicar que el contenido continúa en otra página.
- Reflejar el estilo del periódico: El diseño del remate puede transmitir el tono o la filosofía del medio.
- Aumentar la legibilidad: Al separar claramente los artículos, mejora la organización visual del periódico.
En resumen, el remate no es solo un elemento decorativo, sino una herramienta funcional que mejora la comprensión y la experiencia del lector.
El remate como símbolo de finalización en la prensa
El remate puede considerarse como el equivalente visual del punto final en la escritura. Al igual que el punto indica el final de una oración, el remate señala el cierre de un artículo o sección en un periódico. Esta similitud no es casual; se trata de una manera de organizar el texto de manera clara y eficiente.
En la redacción periodística, donde la claridad es fundamental, el remate actúa como un marcador visual que facilita la comprensión del lector. Al finalizar un artículo con un remate, se le da al lector una señal clara de que el contenido termina allí, lo que ayuda a evitar confusiones, especialmente en publicaciones con múltiples columnas o artículos cortos.
Además, el remate puede incluir información adicional, como la página donde se encuentra el artículo o una nota al pie que aporta más contexto. Esta práctica refuerza la utilidad del remate como una herramienta de comunicación eficaz.
El remate en el contexto de la edición y diseño gráfico
En el proceso de edición de un periódico, el remate es una decisión editorial que debe tomarse con cuidado. El diseñador gráfico debe elegir un tipo de remate que se integre bien con el estilo general del periódico y que no distraiga al lector. Esto implica considerar factores como el tamaño del periódico, el tipo de contenido y el público objetivo.
Por ejemplo, en un periódico de investigación o de opinión, el remate debe ser sencillo y profesional, mientras que en una revista de entretenimiento o una publicación juvenil, puede ser más creativo o incluso humorístico. Esta elección no solo afecta la estética del periódico, sino también la percepción que el lector tiene sobre su contenido.
Además, el remate debe ser consistente en toda la publicación para que el lector pueda asociarlo con el final de cada artículo. Esta coherencia mejora la usabilidad del periódico y facilita la lectura.
El significado del remate en la organización de contenidos
El remate tiene un significado simbólico y práctico en la organización de los contenidos de un periódico. En un contexto editorial, representa el cierre de un pensamiento, una idea o una noticia, marcando un límite que facilita la comprensión del lector. Este elemento no solo ayuda a delimitar los contenidos, sino que también permite al lector avanzar con mayor fluidez por la publicación.
En términos más técnicos, el remate forma parte del sistema de signos y símbolos que estructuran el periódico. Junto con las cabeceras, las viñetas y las ilustraciones, el remate contribuye a la jerarquía visual del contenido, indicando qué secciones son más importantes o qué artículos están relacionados entre sí.
En resumen, el remate no es solo un símbolo gráfico, sino una herramienta clave en la organización y navegación de un periódico, que permite al lector disfrutar del contenido de manera más cómoda y eficiente.
¿De dónde viene el término remate en el periódico?
El término remate proviene del francés *remarquer*, que significa destacar o marcar. En el contexto de la edición periodística, el remate se utiliza como un símbolo que destaca el final de un texto, marcando un punto de cierre. Aunque su uso es más común en los periódicos modernos, el concepto tiene raíces en la tipografía tradicional y en los primeros diarios impresos.
En los siglos XVIII y XIX, los editores de periódicos comenzaron a utilizar símbolos simples como la línea vertical o el punto final para indicar el final de un artículo. Con el tiempo, estos símbolos evolucionaron hacia formas más elaboradas, adaptándose a las necesidades de los lectores y a las innovaciones en la impresión y diseño.
El uso del término remate en español refleja la importancia de este símbolo en la organización del texto, destacando su papel como un marcador visual que facilita la lectura.
El remate en otros contextos lingüísticos y editoriales
Aunque el remate es un concepto específicamente utilizado en la prensa escrita, existen términos equivalentes en otros idiomas y contextos editoriales. Por ejemplo, en francés se utiliza el término *marque de fin*, en inglés *end mark*, y en italiano *marca di fine*. Estos términos reflejan la misma función: indicar el final de un texto o artículo.
En el ámbito de la edición digital, el remate también se adapta a las nuevas tecnologías. En plataformas web, se usan señales visuales como botones de Leer más o flechas que indican que el contenido continúa. Estos elementos, aunque digitales, cumplen la misma función que el remate tradicional en los periódicos impresos.
En resumen, aunque el término puede variar según el idioma o el formato, la esencia del remate como señal de finalización de texto permanece constante, adaptándose a las necesidades de cada medio de comunicación.
¿Cómo se diferencia el remate de otros elementos visuales en un periódico?
El remate se diferencia de otros elementos visuales del periódico en función de su función y ubicación. Mientras que las cabeceras sirven para introducir un artículo, las viñetas para resumir ideas clave y las ilustraciones para ilustrar o complementar el texto, el remate se encarga exclusivamente de indicar el final de un contenido.
Esta diferencia es clave para evitar confusiones en la lectura. Por ejemplo, una viñeta puede destacar un punto importante dentro de un artículo, pero no indica que el contenido haya terminado. En cambio, el remate siempre aparece al final del texto, sin excepciones, y su función es clara: marcar el cierre del artículo.
Además, el remate no se repite dentro del texto, a diferencia de otros elementos como las viñetas o las referencias cruzadas. Esto lo convierte en un elemento único y fácilmente identificable para el lector.
¿Cómo usar el remate en un periódico y ejemplos de uso?
El uso correcto del remate implica seguir ciertas pautas editoriales que garantizan su eficacia y coherencia. A continuación, se presentan algunos pasos y ejemplos para su uso adecuado:
- Ubicación: El remate debe colocarse al final del artículo, después del último párrafo o línea de texto.
- Consistencia: El tipo de remate debe ser el mismo en todos los artículos del periódico para evitar confusión.
- Simbolismo: El remate debe ser claro y fácil de identificar, preferiblemente usando un símbolo que no se confunda con otros elementos visuales.
- Indicación de continuidad: Si el artículo continúa en otra página, el remate debe incluir una señal que indique la página o sección donde se reanuda.
- Estilo: El diseño del remate debe adaptarse al estilo general del periódico, manteniendo una coherencia visual.
Ejemplo práctico: En un artículo de opinión publicado en *El País*, el remate puede ser una línea horizontal seguida de la palabra Fin, indicando que el contenido ha terminado. En un artículo de investigación publicado en *The New York Times*, el remate puede ser un asterisco que apunta a una nota al pie que indica la página donde se continúa el texto.
El remate como parte de la identidad visual de un periódico
El remate también puede contribuir a la identidad visual de un periódico. Al elegir un diseño particular para el remate, los editores pueden reflejar el tono, la filosofía o el público objetivo del medio. Por ejemplo, un periódico serio y profesional puede optar por un remate sencillo y discreto, como una línea horizontal, mientras que un periódico juvenil puede usar un remate más llamativo o incluso animado.
Además, el remate puede integrarse en la identidad visual del periódico de manera creativa. En algunos casos, los diseñadores gráficos han utilizado remates que incluyen elementos gráficos relacionados con la temática del artículo, como un dibujo de un balón de fútbol en un artículo deportivo o un icono de un libro en un artículo literario.
En resumen, el remate no solo sirve como un marcador funcional, sino también como un elemento de diseño que puede enriquecer la experiencia visual del lector y reforzar la identidad del periódico.
El remate en el futuro de la prensa digital
A medida que la prensa evoluciona hacia formatos digitales, el remate también se transforma para adaptarse a las nuevas plataformas. En medios digitales, el remate tradicional puede ser sustituido por señales interactivas, como botones que permiten al lector avanzar a la siguiente sección o incluso recibir notificaciones cuando el contenido se actualiza.
En aplicaciones móviles, por ejemplo, el remate puede funcionar como un marcador que permite al lector guardar su progreso y retomar la lectura en otro momento. Esta adaptación no solo mejora la experiencia del usuario, sino que también refuerza la importancia del remate como elemento de navegación.
En el futuro, es posible que los remates se integren con sistemas de inteligencia artificial para ofrecer recomendaciones personalizadas, como sugerir otros artículos similares o permitir al lector acceder a contenidos relacionados de manera automática. Esta evolución refleja la capacidad del remate para adaptarse a las necesidades cambiantes de la prensa y el lector.
Raquel es una decoradora y organizadora profesional. Su pasión es transformar espacios caóticos en entornos serenos y funcionales, y comparte sus métodos y proyectos favoritos en sus artículos.
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